



Muy complicado describir lo que ha pasado hoy en Mestalla. Cualquiera que no haya visto el partido pensará en una cómoda victoria del Sevilla, pero nada más lejos de la realidad.
La estadística oficial marca tres tiros de los hispalenses entre los tres palos y dos han acabado en gol. En cuanto a la polémica arbitral esto ya huele a podrido desde lejos. En el primer gol del Sevilla hay una clara falta de Badé sobre Yunus pero esta vez no se tiene en cuenta y se da validez al gol, que por cierto viene precedido de un desafortunado rebote. Era el minuto 55. En el 61 unas claras manos de Fernando son revisadas por Del Cerro Grande considerando este que el brazo en el aire ocupaba una posición natural. Todo el mundo esperaba la confirmación de la pena máxima pero no llegó. No nos lo podíamos creer, no se lo podía creer nadie.
No estaría muy contento el colegiado cuando en el 82 decretó un inexistente penalti sobre Marcos André que fue corregido, esta vez bien (para perjudicarnos, claro) por el VAR. Antes habíamos encajado el segundo en jugada aislada obra de Suso, minuto 75.
Enésima derrota del Valencia fuera de Mestalla en un partido señalado como vital. Con muy poco hemos sido derrotados por un Almería que suple con ganas sus carencias futbolísticas. El lazo ya lo tenemos en el cuello y ya sólo un milagro nos puede salvar.
Podemos decir que se pudo pitar penalti a nuestro favor en la primera mitad en dos ocasiones, un agarrón sobre Diakhaby y sobre todo un golpe al tobillo de Kluivert propiciado por el guardameta almeriense tras un mano a mano en el que la pelota cogió puerta pero no fuerza suficiente para alcanzar portería antes de la llegada del último defensor del Almería. Pero no es excusa, hay que hacer algo más. Para colmo de males nuestro hombre más en forma, hablamos por supuesto de Kluivert, tuvo que ser sustituido por lesión.
Agridulce empate del Valencia en Mestalla. Agrio porque un punto en nuestra situación nos vale de muy poco, y dulce porque el partido se puso muy pronto cuesta arriba y esta temporada eso era hasta ahora irremediablemente sinónimo de derrota.
Con el primer desajuste defensivo conseguía el Rayo marcar. Centro al área y los dos centrales se van tras el mismo jugador dejando a Comesaña totalmente solo para batir a Mamardashvili, que aún así logró tocar y casi despejar el balón. Muy mal empezábamos. Poco a poco el Valencia fue cogiendo más confianza, liderado por el hoy titular Almeida y en el 25' Kluivert, el mejor del partido, remató al poste un buen centro de Gayá. Lo siguió intentando el Valencia sin fortuna. La referencia ofensiva de hoy, Cavani, muy discreta hasta su sustitución.
En la segunda parte nuestro equipo salió volcado y hubo compases del partido en los que literalmente se estaba merendando al Rayo. Pero no había gol, nos costaba un mundo tener una buena ocasión. Gayá se ha hinchado a centrar balones pero no se ha rematado con claridad. La mejor ocasión la tuvo de nuevo Kluivert con paradón de Dimitrievski.